Países Nórdicos: Turismo y curiosidades

Este pasado miércoles asistimos en Madrid al Workshop Nórdico, un evento profesional en el que representantes de empresas y oficinas de turismo de los Países Nórdicos: Dinamarca, Suecia e Islandia mostraron parte de su oferta turística. Aunque no fue un evento especialmente masivo, ni especialmente notable, estuvieron representados buena parte de los principales representantes en España del turismo en los países nórdicos, algo que nos sirve para hacer un pequeño análisis de lo que hemos visto y hablar un poco de lo que estos destinos nórdicos nos pueden ofrecer, tanto para la temporada de invierno, como más adelante.

Antes que nada, una pequeña pincelada de contexto a la hora de hablar de los Países Nórdicos. A veces se utiliza esta expresión como sinónimo de Países Escandinavos o Escandinavia, cuando se trata de zonas geográficas que comprenden diferentes países. A la hora de hablar de Escandinavia, nos referimos únicamente a los países de la Península Escandinava (que son Noruega y Suecia) y, por afinidad cultural e histórica con ésta, a Dinamarca. El concepto Países Nórdicos es bastante más amplio e incluye también a Finlandia e Islandia.

Workshop Nórdico

Aclarado esto, hay que decir es que echamos de menos a representantes de Noruega y Finlandia para considerarlo un Workshop de los Países Nórdicos completo, si bien sí que estuvo presente bajo bandera sueca un stand de la aerolínea de bajo coste Norwegian, muy activa últimamente en las rutas entre España y Escandinavia. Por el contrario, nos sorprendió muy gratamente la presencia de organismos turísticos, aerolíneas y representantes del turismo de Islandia, demostrando que es un destino que está ya apostando por atraer a los visitantes españoles.

Hay que reconocer que los Países Nórdicos no son precisamente un destino para todo el año, lo que hace que después del cercano Puente del Pilar -donde aún se podrán aprovechar algunos días de tiempo y horas de luz aceptables- sea más un trabajo de preparación de los viajes de la primavera y el verano del año próximo que de visitas inmediatas. Con las honrosas excepciones del agradable ambiente que se pueden vivir en los mercadillos navideños de Copenhague o Estocolmo, el turismo de deportes de invierno o la curiosa posibilidad de pasar el fin de año en Laponia. Por nuestra experiencia, la mejor época para visitar los Países Nórdicos son los meses de mayo y junio, pero nunca es suficientemente pronto para empezar a recopilar información.

Turismo en Islandia, más barato y accesible

Entre las novedades de los Países Nórdicos, nos sorprendió la pujanza del turismo en Islandia, un país cuya situación y conexiones han cambiado radicalmente en los últimos años. Era un país al que viajar, hace unos años, resultaba tremendamente caro y muy difícil por la escasez de vuelos. La situación económica del país, que ha visto su moneda devaluada más de un 25% en los últimos dos años, ha hecho que el altísimo poder adquisitivo y los elevados precios que perjudicaban al turismo se hayan reducido notablemente, lo que ha supuesto que viajar a Islandia sea ahora muchísimo más barato que hace unos años.

Entre las sorpresas agradables, por ejemplo, la presencia de la compañía aérea de bajo coste Iceland Express, que este año ha mantenido dos rutas directas durante los meses de verano entre Keflavik y los aeropuertos de Barcelona y Valencia. Las frecuencias aún no eran muy numerosas y aún no se estaban planteando ampliar el tiempo o incorporar vuelos desde Madrid, pero ofrecían una posibilidad muy interesante: utilizar Islandia como punto de escala con para vuelos a la Costa Este de Estados Unidos -donde también ofrecían vuelos a bajo coste- y poder combinar un viaje a América con una pequeña estancia en la isla. Los precios más económicos, desde España, superaban ligeramente los 200 euros ida y vuelta, lo que supone una rebaja considerable con los precios que se manejaban hasta ahora.

Nos encontramos también con empresas de excursiones en Reykjavik y en el resto de Islandia. La riqueza natural del país es impresionante y la dificultad orográfica y la baja densidad de población del país favorece el negocio de las agencias que facilitan excursiones por toda la isla. Especialmente interesante fue tener noticias de Special Tours, una agencia que organiza pequeños cruceros turísticos en las cercanías de Reykjavik para ver ballenas y aves típicas de la zona.

En general, a los españoles nos sigue faltando información sobre Islandia y, especialmente, alternativas para llegar allí; pero si se continúa el buen trabajo en lo que se refiere a la apertura de rutas aéreas y a facilitar información a posibles turistas futuros, no dudamos que se convertirá en un destino muy interesante para los meses de verano. De momento, la realidad de que Islandia era un país excesivamente caro para viajar, parece haber quedado atrás.

Suecia y Dinamarca: Países Nórdicos consolidados

Entre los Países Nórdicos, Dinamarca y Suecia, por su parte, son mucho más conocidas para el público español en general y mucho más accesibles para visitar por conexiones, información y conocimiento previos. Son países con muy buena imagen, lo que han aprovechado para impulsar sus actividades de promoción turística. En Voya Internet.com conocemos ambos muy bien -no en vano, la primera guía que lanzamos fue la de Copenhague y poco después lanzamos la de Estocolmo– y son destinos que realmente muy interesantes para la primavera y el verano, las épocas de más luz.

Este año esperamos un impulso de turistas durante todo el año en Estocolmo por la apertura de la ruta de Ryanair al aeropuerto de Skavsta desde Madrid en el mes de noviembre (algo similar esperamos para Oslo). Durante los meses más fríos y más oscuros, se puede aprovechar la riqueza museística de la ciudad o- como nos proponían en el stand de Silja Line– disfrutar de alguno de los cruceros por el Báltico congelado (a Helsinki, las Islas Aland o Tallin) que son un espectáculo en sí, pleno de diversión y de buen ambiente.

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Otra opción en los Países Nórdicos es disfrutar del Estocolmo pre-navideño, con su mercado de Navidad. Personalmente, creemos que Estocolmo es una ciudad impresionante para visitar en cualquier época, pero se disfruta mucho más con luz solar. En la primavera es mucho más factible, pero quien tenga suerte de encontrar uno de esos días fríos, pero soleados, de invierno en Estocolmo tendrá a su disposición un paisaje urbano impresionante.

Goteborg, por su parte, también tiene un ambiente muy agradable en Navidad -aunque es una mala época para visitar su precioso archipiélago, lo mejor de la ciudad- y Malmoe, Lund y otras localidades de la región de Skane- en el sur de Suecia- son mucho más accesibles desde la cercana Copenhague que desde otras zonas del país. Es una pena que Malmoe haya dejado de recibir vuelos de Ryanair, como hacía hace unos años, ya que ahora pasa demasiado desapercibida para quienes sólo visitan Copenhague.

En Dinamarca seguimos echando de menos una conexión de los dos grandes del bajo coste (Ryanair o EasyJet) a Copenhague. Aunque Norwegian y Cimber Air están cubriendo el hueco low-cost bastante dignamente y SAS aprovechó el Workshop Nórdico para promocionar sus rutas y sus muy buenas conexiones con todos los Países Nórdicos y Bálticos desde la capital danesa.

Nos queda la opción de Billund, pero la Península de Jutlandia nos resulta turísticamente poco interesante, salvo que se quiera visitar Legoland. En verano se puede disfrutar de su tranquilidad o de rutas ciclistas por todo el país (un auténtico paraíso para el ciclista, llano, con miles de kilómetros de carril-bici y un respeto total por parte de los automovilistas), pero resulta una región extraordinariamente aburrida (en la isla de Zelandia, donde se encuentra Copenhague, se les conoce «cariñosamente» como «bonderove» -traducido literalmente como «culos de granja» o, menos literalmente, como «paletos»-). Sólo en Aarhus y en la pequeña y pintoresca Aalborg hay algo de ambiente urbano.

No subestimemos Copenhague, de todos modos, como destino tanto en invierno como en verano. El tiempo, aun siendo frío y con poca luz solar, no es tan duro como en el resto de los Países Nórdicos y su animadísima vida nocturna hace que siga siendo un destino muy joven y muy divertido en cualquier época del año.

Nos quedó, por último, la presencia de representantes del turismo de Groenlandia dentro de la delegación danesa. Un destino tan impresionante como difícil dentro de los Países Nórdicos. Se trata de la isla más grande del mundo, pero está habitada por poco más de 50.000 habitantes distribuidos principalmente en varias ciudades de la costa del sur de la isla. La mayor parte del territorio, todo el interior durante todo el año y buena parte de la costa en los meses de invierno, se encuentra congelada o bajo el hielo, por lo que resulta demasiado inhóspita para visitar y no apta para cualquier turista. Las principales poblaciones no se hallan comunicadas por carretera, por lo que hay que recurrir a los barcos o al helicóptero para moverse por ellas. Eso sí, es un paraíso para el turismo natural o de aventura. Incluso, en las zonas meridionales, la primavera y el verano crean unos paisajes llenos de espléndida vegetación.

Entre los Países Nórdicos es el destino más caro y de muy difícil acceso, sin duda. También resulta prácticamente imprescindible moverse con un guía, un grupo organizado o una agencia. Pero, a cambio, ofrece paisajes naturales impresionantes y vírgenes y unas posibilidades de desarrollar actividades de aventura en zonas heladas muy interesantes para quienes busquen este tipo de turismo. Nuestros (pocos) conocidos que la han visitado la recomiendan muy especialmente.

En resumen, el Workshop de los Países Nórdicos nos deja una Islandia con perspectivas muy prometedoras y unas Dinamarca y Suecia muy consolidadas. Nos agradó mucho poder contactar con las oficinas de turismo de estos países y, sobre todo, explorar las oportunidades que nos ofrecen las compañías aéreas tradicionales y de bajo coste para mejorar las conexiones con estos destinos. Seguimos pensando que a los Países Nórdicos se les saca mucho más jugo en verano, pero las grandes ciudades pueden ser también un buen destino para los días de invierno.

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